• DE PAREJA
Si crees que tu relación de pareja puede mejorar puedes pedir otro punto de vista.
En muchas ocasiones sentimos que “nos falta algo”:
- Comunicación afectiva.
- Saber discutir.
- Creatividad en nuestras relaciones sexuales.
- Entendernos mejor como padres.
- Hacer cosas juntos…
… y nuestra pareja no es consciente de todo ello. Puedo solicitar ayuda yo sola o junto con él /ella. Aunque sintamos que nuestra relación está agonizando… a veces sólo necesita un giro diferente.
A las sesiones asiste la pareja. Pero en determinados momentos me es útil hablar con uno o con otro por separado en función de las parejas, de los temas que se tratan, de lo que ellos me demanden.
• FAMILIAR
Se trata de Terapia Familiar Sistemática Breve Centrada en Soluciones.
Se marca una sesión al mes para tratar problemas personales. Me gusta implicar a la familia porque inconscientemente favorecen o dificultan los cambios . Ellos aportan una visión diferente a la persona que más sufre el problema.
Cuando tenemos alguna dificultad en nuestra vida nuestro estado anímico “salpica” a los que más queremos (amigos y familiares). Es como una tela de araña en la que nos vemos atrapados todos los que vivimos esa situación. La compañía de familiares y/o amigos es primordial para que el cambio sea más rápido y estable en el tiempo.
De una sesión a otra se nota mejoría. El número máximo de sesiones son 10, pero es díficil agotarlas todas.
Me es muy útil que la persona que quiere solucionar su problema venga acompañada de alguien de confianza (en ocasiones prefieren que sean amigos en lugar de familiares) porque es más amplia la información que tengo de la situación a modificar y porque las personas que nos rodean pueden facilitar que salgamos antes del problema que nos ocupa. Entre todos encontraremos la situación más adecuada para aquello que deseamos cambiar.
• INDIVIDUAL
Es una modalidad de la terapia familiar. Hay personas que prefieren asistir solas a terapia porque no quieren preocupar a sus seres queridos, porque prefieren no implicarlas o porque son muy reservadas.
El sistema de trabajo es el mismo. La diferencia que veo, desde mi experiencia, es que es una terapia un poco más lenta, lo que se traduce en una o dos sesiones más.
Como he comentado en otros apartados, el respeto es fundamental y soy yo, la terapeuta, quien me debo adaptar a las personas que asisten a terapia, no ellas a mí.
Hay personas que no quieren venir acompañadas y es importante respetar su criterio. La terapia o la orientación familiar se realiza con la persona que asiste a la clínica psicológica.
• ELABORACIÓN DE DUELO
Hay muchas personas que le tienen miedo a la muerte. Cuando aparece la enfermedad o el fallecimiento de alguien cercano los síntomas de ansiedad se “dispersan”.
Es en este momento cuando se demanda ayuda. También durante los meses posteriores al funeral. El paciente pasará por unas determinadas fases. El psicólogo acompaña durante este período.
Dentro de la terapia familiar se incluye “esta modalidad”. Los niños se aburren en una sesión de 60 minutos y vernos una vez al mes no es efectivo para los cambios. Por lo tanto con ellos cambian las pautas: los veo cada 15 días en sesiones más cortas (unos 30 minutos cada una).
En la primera sesión prefiero que los niños vengan acompañados de sus progenitores (o al menos de uno de ellos). El trabajo se hace en equipo. Para algunas orientaciones no es necesaria la presencia de los niños.
La terapia infantil suele realizarse en muy pocas sesiones (una o dos), la mayoría de los casos son “orientaciones familiares” que descargan la tensión que se vive en algunos hogares.
